La derrota encajada el pasado sábado ante el Arxil de Pontevedra ha supuesto un duro mazazo en el seno del club zamorano que, sin embargo, descarta por el momento adoptar cualquier medida drástica.
«Mantenemos la confianza en la plantilla y estamos seguros de que las jugadoras y el técnico conseguirán mejorar su juego y volver a sumar victorias», declaró ayer Baz quien recordó a sus jugadoras la obligación como profesionales que tienen de rendir al nivel que se espera de ellas.
La reunión fue promovida por el entrenador, Juan de Mena, y la directiva quiso mostrar su respaldo al técnico zamorano -alma máter del club- participando también en el encuentro que discurrió por cauces de cordialidad y sinceridad entre ambas partes.
El equipo sumó el pasado sábado su quinta derrota en once partidos, cuando se estima que las plazas de fase de ascenso se ganarán con un máximo de ocho partidos perdidos. El margen de maniobra es ya mínimo para el Caja Rural Valbusenda y además, el calendario no es demasiado propicio ya que los próximos rivales serán el Extrugasa en Villagarcía de Arosa, el próximo sábado, y el Arrans Jopisa Burgos, el día 3 de enero.
En la reunión de ayer, las jugadoras reconocieron las capacidades que tienen y mostraron su predisposición a poner todo de su parte para sacar al equipo de este mal momento.
Con esta predisposición, el equipo afronta ya la preparación del último partido del año frente a un rival de auténtico cuidado como es el tercer clasificado, el Extrugasa, en el que milita la ex jugadora del Zamarat, Ylenia Manzanares, que ya es la más valorada del equipo. Además, el club de Villagarcía de Arosa dispone de una plantilla con un plantel de jugadoras envidiable para cualquiera como son la portuguesa Cristina Souza , la norteamericana Christina Quaye , la base Montserrat Gilabert o la búlgara Veselka Todorova o la pivot nacional Sara Ruiz.
